El S&P 500, el índice más representativo de las empresas cotizadas en Wall Street, ha marcado máximos históricos, mientras los bonos en Europa están marcando mínimos históricos.

Sin duda, las citas más esperadas esta semana han sido las declaraciones de los máximos responsables de los bancos centrales en la Zona Euro y EEUU. El primero de ellos, Mario Draghi, en fase de salida, para dar el relevo a sus sucesor, se aventura a afirmar que están pensando en bajar tipos de interés.

A todas luces, los inversores, analistas y economistas, no dan crédito a sus palabras. En primer lugar hay que tener en cuenta que toda la política monetaria ultra expansiva que lleva aplicando desde hace años, no ha conseguido ninguno de sus logros. La inflación no llega al 2% y la economía lejos de recalentarse, se desacelera de forma alarmante.  En segundo lugar, la pregunta crucial es ¿que podrá hacer su sucesor, cuando coja las riendas a final de año?. La respuesta está llena de incertidumbres, porque navegan por aguas no exploradas anteriormente y por tanto es una gran incógnita.

Buena parte de los economistas consideran que no se bajarán tipos de interés en la Zona Euro. Mientras tanto, los bonos de Alemania a 10 años marcan un mínimos históricos, casi cada día, con rentabilidades negativas que ya superan el -0,30 %. En España tenemos en negativo las letras de tesoro a un año y los bonos a 10 años. Los gestores y analistas están alertando que ya tenemos en negativo casi un tercio de la deuda emitida en circulación.

Las entidades bancarias cotizadas de nuestro país, de nuevo están sufriendo en sus precios, el hecho de que los tipos en negativo, tanto en niveles actuales como en potenciales niveles más bajos, seguirán minando sus beneficios y con ello sus valoraciones en los mercados de capitales. Por su parte el Banco Central Europeo les sigue recomendando cerrar sucursales y despedir personal, por el alto coste que supone la elevada plantilla, aunque ya la han reducido en los últimos años

Por su parte, la Reserva Federal de EEUU, ha anunciando esta semana que está dispuesta a bajar los tipos de interés, si los datos macroeconómicos reflejan desaceleración en los próximos meses. Los mercados financieros están descontando en los precios de los activos, que en los próximos 12 meses, bajarán los tipos un 1%. Algunos gestores consideran que esta bajada puede ser excesiva y creen que bajarán los tipos, pero por debajo de ese 1%.

La confirmación de la bajada de tipos en los próximos meses, ha sido la gasolina que ha impulsado buena parte de los índices bursátiles del mundo.

Mientras tanto, los inversores en euros, se van a tener que hacer a la idea de que para superar la inflación en los próximos años, sus carteras de inversión deberán ser más globales, buscando rentas, y tener más renta variable, sobre todo de sectores defensivos, dado que estamos en un cambio de ciclo.

También es recomendable no analizar la rentabilidad cada año, sino en periodos temporales superiores a tres años, para evitar los rendimientos negativos y tener opciones de superar la inflación.